Las deudas a los hospitales y clínicas volvieron a aumentar en el primer semestre de este año.
Según el más reciente informe de cartera hospitalaria con corte a junio 30 de 2021, elaborado por la Asociación Colombiana de Hospitales y Clínicas, ACHC, en un grupo de 205 entidades, las deudas por servicios de salud prestados ascendieron a los $12.7 billones de pesos, de los cuales el 55.6% es deuda que supera los 60 días.
El estudio señala que la deuda total a junio de 2021 es superior en más de $2 billones de pesos frente a los $10.6 billones reportados en diciembre de 2020, lo que indica una variación aproximada del 20% en el transcurso de un semestre.
Nuevamente los mayores deudores de los hospitales y clínicas son las Entidades Promotoras de Salud (EPS) del Régimen Contributivo con el 50,4 % del total de la deuda, que corresponde a $6.4 billones de pesos; seguido por las EPS-S del Régimen Subsidiado, el 21,0 % de la deuda total que equivale a $2.6 billones de pesos y en tercer lugar la entidades del Estado que incluye la deuda de las Entidades Territoriales, el extinto Fosyga, la deuda de la nueva Entidad Administradora de los Recursos del Sistema General de Seguridad Social en Salud –ADRES- y otras entidades del Estado como fuerzas militares, Policía Nacional, ministerios, entre otros, con el 10,6 % que corresponde a más de $1.3 billones de pesos.
El 18% restante son deudas de las ARL, las Empresas de Medicina Prepagada, planes complementarios, las aseguradoras SOAT, el magisterio, algunas IPS, usuarios particulares y otros.
El estudio de la ACHC, que desde hace 23 años hace seguimiento al comportamiento de la cartera hospitalaria, indica que en el régimen contributivo la mayor cartera es la de Nueva EPS, con $1.9 billones de pesos, con una morosidad del 49,2%, seguido de Medimás EPS con $663.858 millones, y Coomeva EPS, con $554.111 millones, los dos últimos con unos porcentajes altos de morosidad que corresponden al 71,3% y 73,3% respectivamente.
En este grupo las EPS que han tenido mejor comportamiento en el pago de sus deudas son Compensar, Aliansalud y Sura EPS, con una cartera morosa inferior al 27%.
Respecto a las deudas de las EPS del régimen subsidiado, la mayor deudora sigue siendo la EPS mixta Savia Salud con $413.475 millones, donde el 52,1 % corresponde a cartera en mora, seguida de las EPS-S privadas en operación, Emssanar ESS con $ 293.039 millones y Asmet Salud ESS con $ 281.670 millones.
En cuanto a los entes territoriales, el corte a junio de 2021 arroja un monto total adeudado de $800.779 millones, que representa el 6,3 % de la deuda total.
En esta categoría el mayor deudor es el Departamento de Norte de Santander con $127.139 millones, de los cuales el 79,3 % es cartera morosa.
Al analizar por deudores morosos, es decir entidades que tienen los mayores montos de deudas superior a 60 días, el ranking lo encabeza la Nueva EPS, seguido por Medimás EPS SAS, en tercer lugar, Cafesalud EPS, en el cuarto lugar Coomeva EPS y en el quinto puesto el extinto Fosyga junto con la ADRES. (ver cuadro anexo)
De otro lado, el estudio de la ACHC, indica que la deuda de las EPS de los regímenes contributivo y subsidiado, en situación de liquidación, intervención, medida cautelar de vigilancia especial, en programa de recuperación o liquidación voluntaria ascendió a $4.6 billones de pesos, de los cuales el 71,9% es cartera en mora.
El estudio advierte que las EPS de este grupo que siguen en funcionamiento concentran el 29,1 % del total de afiliados al Sistema de Salud en Colombia a junio de 2021, es decir cerca de 14,6 millones de afiliados, cuya atención podría estar en riesgo.
Otros deudores de los hospitales y clínicas son las aseguradoras SOAT, cuya deuda total con este grupo de IPS llego a los $189.650 millones de pesos con el 62.9% de cartera morosa. Los mayores deudores de este grupo son: Compañía Mundial de Seguros S.A, La Previsora S.A, Seguros de Vida del Estado S.A, Axa Colpatria Seguros S.A y Seguros de Vida Suramericana S.A.
Juan Carlos Giraldo Valencia, director general de la Asociación Colombiana de Hospitales y Clínicas, señaló que “El sector hospitalario no solo se preparó, sino que ha respondido de manera oportuna a la pandemia y hoy tiene una gran necesidad de liquidez para seguir brindando los servicios de salud en condiciones bioseguras, cumplir con el pago al personal de salud, garantizar la atención de enfermedades diferentes al Covid y estar preparados para un posible cuarto pico de la pandemia.
Desafortunadamente los resultados de este estudio evidencian cómo las deudas están volviendo al nivel que se tenía antes de la pandemia y que algunos de los compradores de los servicios no han corregido las prácticas que afectan el flujo de recursos” y agregó que “Además, preocupa que los planes de salvamento de algunas de las entidades deudoras propongan capitalizaciones de deuda, la condonación de un porcentaje importante de la deuda y plazos de hasta una década para pagar el resto de lo adeudado”.
Así mismo, para mejorar la liquidez del sector prestador, el director de la ACHC insistió en la necesidad de establecer el giro directo universal, garantizar que los recursos del Acuerdo de Punto Final lleguen a las IPS y se dispongan fondos para las líneas de crédito de Findeter, entre otros.